lunes, 20 de febrero de 2012

Capitulo 39


Cassandra...

Ni siquiera me moleste en levantarme temprano, la tarde anterior me habían mandado una notificación de suspensión por 2 días de clases a causa de no haber asistido a alrededor de 12 clases en el mes.
Eran alrededor de las 9 de la mañana y los rayos del sol que atravesaban las ventanas y chocaban con mi rostro no me dejaban dormir mas.
Me di una ducha rápida, lave mi rostro y mis dientes y me hice una coleta.
Me puse un suéter blanco y una chaqueta de mezclilla encima y unos pantalones de mezclilla gris con unas botas de invierno sin tacón color gris para caminar bien entre la nieve.
Una suspensión no era tan mala después de todo, estoy mas que segura que Marjorie me pasaría los apuntes y ademas dormiría mas y no haría nada durante todo el día.
Primero fui a la biblioteca a sacar algunos libros para leer después y de ahí me fui a la cabaña de John y Mike.
Tenia planeado seguir practicando mi cocina, ya que para ser sincera era terrible en ello.
Aun no estaba segura de a quien le estaba preparando esto, ¿A Luke... o a Bill?
Suspire en un intento de sacar todas las presiones que llevaba encima y concentrarme en la mezcla que estaba haciendo.
Tres días para San Valentin y con Tom ya habíamos arreglado casi todo para lo de Marjorie.
Seria tal y como lo habíamos planeado antes, ahora solo tenia que asegurarme de que Marjorie se viera hermosa y que todo saliera de acuerdo al plan.
Mientras yo, seguramente me la pasaría todo el día arreglando su cita, sola, Bill estaría muy ocupado en La Asociación, Luke... bueno, de Luke nunca se sabe si estará ocupado o no. Tal vez me pasara por La Asociación un rato, no se.
Probé los chocolates que había hecho y no me habían salido tan mal, una sonrisa de autosuficiencia se dibujo en mi rostro.
Limpie todo y me comí algunos de los chocolates que había preparado y salí de la cabaña rumbo a mi habitación que era donde se me permitía estar únicamente.
Durante el transcurso sentí la presencia de Nicolas, la ignore y decidí ir a ver a Luke, a lo mejor y hoy si estaba.
Tan pronto como llegue al edificio de los e ultimo año la presencia de Nicolas acechándome desapareció, eso solo significaba una cosa, Luke estaba ahí.
Me dirigí con toda la confianza del mundo a su oficina.
Llame a la puerta dos veces y a la tercera Michael ya estaba abriendo la puerta y casi lo golpeo.
-PERDÓNAME.-dije tomándole el rostro verificando que no lo hubiera golpeado.
Luke frunció el ceño y dejo de jugar billar para mirarnos con atención.
-E-estoy bien señorita Cassandra.-dijo Michael ahora algo nervioso alejándose de mi para acto seguido despedirse y salir de la oficina dejándonos a mi y a Luke a solas, como siempre.
Me había percatado de los celos de Luke... dios mio.
-Toma asiento, si lo deseas.-dijo Luke volviendo a su juego de billar, parecía molesto.
Asentí y me senté como quien no quiere la cosa.
Pasaron algunos segundos de un incomodo silencio y decidí romperlo.
-Decidí pasar a visitarte un rato, hace días que no te veo...-dije mordiendo mi labio inferior algo nerviosa.
-He estado ocupado.-dijo fríamente sin mirarme.
-Oh, ya veo...-lo mire atenta.
-Tengo algo en la cara?-pregunto.
Como sabia que lo miraba si el estaba a espaldas de mi? Debió haber sentido mi mirada...claro.
Me puse de pie y camine alrededor de la habitación, de vez en cuando lo miraba.
-Estas molesto?
El no contesto.
-No hemos hablado mucho desde la ultima vez.. que fui muy grosera contigo...- el no contesto así que proseguí-   lo lamento... estaba algo confundida, y estresada, no fue mi intención gritarte... jamas he querido ser grosera contigo, eres la ultima persona en la faz de la tierra con la cual yo quisiera estar peleada. Espero que entiendas eso, lo importante que eres para mi, no a cualquiera le regalaría un objeto tan preciado para mi como esa muñeca que te di en Navidad-sonreí al recordar esa noche y el brazalete que Luke me había dado, lo tenia guardado en un cajón, como si fuera mi mas preciado secreto.- Ni le hubiera dado 11 años de mi vida, ademas, no tienes porque ponerte celoso de Michael, muy apenas he hablado con el, como podría sentir algo por el...-reí- cuando por ti lo siento todo.

De donde habían salido esas palabras? De mi cabeza claramente no salieron, era mi corazón el que estaba hablando. Acababa de tomar una decisión? Luke? El? Era el con el que yo debería estar?

Bill....

Habían suspendido a Cassandra y no vendría a clases por dos días, las clases terminaron y ya había hablado con el profesor sobre el comportamiento de Caroline y ella había quedado en detención por haberme armado un escándalo en el almuerzo por haberla ignorado.
No me quedo mas que hacer mas que ir a La Asociación algo temprano.
Cuando iba entrando a La Asociación me tope con algo que jamas creí ver en mi vida.
Era una chica con un vestido color melón que hacia que su piel se viera simplemente hermosa y brillara, unas zapatillas del mismo color que el vestido que le hacia lucir mucho su increíble figura, su cabello color marrón caia en ondas sobre sus hombros y se movían con el viento mientras ella bajaba de un auto negro que pertenecía a La Asociación.

-Oye tu mocoso, que tanto le miras a mi hermana?-dijo Fred sacándome de mis pensamientos.
-Eh?.. EH?-reaccione.
Esa era Hayley, aquella chica machorra que caminaba y actuaba como hombre, ahora estaba caminando con gracia como toda una mujer.
-HAYLEY?-pregunte exaltado.
-Que?-pregunto ella dirigiendo su mirada hacia mi con confusión y desinterés.
-Dios mio que te paso?
-Fuimos a una misión... es todo.
-No lo puedo creer, te ves... deslumbrante.-dije aquello sin pensar y sus mejillas se encendieron.
-Gracias.-dijo algo entre avergonzada y molesta, dio media vuelta y entro a La Asociación dando zancadas como siempre.
Reí.
Fred me miraba con suspicacia.
-Que?
-Te estaré vigilando chico... te estaré vigilando.
Volví a reír y ambos entramos a La Asociación a hacer lo nuestro.
Leí unos dos libros y Fred me hizo resumirselos.
Por alguna extraña razón, Hayley vagaba en mis pensamientos, no podía sacarla de ellos, simplemente estaba impresionado.

Esa chica si que era bella.

Cassandra...


El me miro con un brillo irreconocible de felicidad en sus ojos.
Yo no supe que decir, un nudo se había formado en mi garganta y no planeaba deshacerse.
El inmediatamente dejo de jugar billar y rodeo la mesa hasta llegar a mi.


-Que?
-No-no lo se.-tartamudee.
-Dijiste que soy tu todo?
-Eso.. eso creo.-dije algo insegura, mi corazón latía a mil. Era esto de lo que hablaba Marjorie?
-Cassandra... -sonrió y me tomo en brazos, su perfume me dejo algo atontada y luego volví en mi- En pocos días es San Valentin, tenia planeado ir a buscarte a clases con un ramo de campanulas azules, pero me entere que te suspendieron...-dijo con un tono de represión- entonces, creo que es el momento perfecto para invitarte a cenar ese día, aceptas?
-..Si.-dije con una enorme sonrisa, lo abrace con todo mi amor. Recordé que tenia que ayudar a Tom esa noche.- Oh.. olvide que tenia algo que hacer esa noche, lo siento, lo siento muchísimo.
-No importa...-dijo algo triste.
-..Pero.. haré todo lo posible para cambiar mis planes, te avisare mas tarde si lo logro.-le dedique una cálida sonrisa.
-Esta bien.-me devolvió la sonrisa y me derritió toda como un helado al sol.
-Vale, te veo luego.-me despedí dándole un beso en la mejilla y salí de allí directo a mi habitación.
Ya era algo tarde, supuse que los chicos ya habrían terminado las clases y vendrían a sus habitaciones, me senté en el balcón a esperarlos.


NOTA: esto va antes de lo de Bill.. obviamente:)


Les iba a escribir mas pero mi papa me quito el computador y no se hasta cuando me lo regrese, no tengo mi ipod y pues ya vere como le hago, ni tiempo para editar el capitulo me dio:( las quiero mucho!

sábado, 18 de febrero de 2012

Capitulo 38


Capitulo 38.


-No puedo y ya deja de interrogarme que me estas haciendo sentir incomoda, ¿Sabes? Mejor me largo, por tu culpa me van a suspender por haberme saltado la clase, agh.
-Bipolar.
-No me dirijas la palabra ¿Quieres?
-Wo wo wo, ¿Porque el cambio de humor cariño?
-Porque se me da la regalada gana, "CARIÑO"-dijo recalcando la ultima palabra y saliendo hecha una furia de la biblioteca, yo reí por lo bajo.
Aunque no podía sacarme la duda de que es lo que le sucedía a esta chica que la traia así.




Cassandra...


Se que le había hablado terrible a Bill, pero fue sin intención.
No podía decirle nada a Bill sobre Nicolas, el seria capaz de ir a buscarlo y yo se que de ahí Bill no salia vivo.
Ademas, el estaba en lo correcto, mi humor cambiaba cada cinco segundos y eso no estaba bien, lo mejor seria que me auto-controlara, ademas, ya casi es San valentin, he estado practicando como hacer chocolates, los primeros intentos sabían a mierda, ni siquiera parecían chocolates, los segundos por alguna razón salieron verdes, los terceros estaban deformes, los cuartos.. si, hice muchos intentos, bueno mejor digamos que el ultimo intento ya iba mejor, tenia color de un chocolate, la forma del molde, y dejemoslo así jijiji 
Marjorie me había estado ayudando, al parecer ella también tenia la intención de darle algo a Tom, ostia, la tonta no sabe lo que le espera!


-Entonces, le pones el azúcar, pero solo un poco.
-¿Asi?
-NOOOOOOOOOO.
-Bueno, soy humana, entiendo con palabras no a gritos-.-
-Lo siento, pero es que eso no es la azúcar Cassandra, eso es sal....
-¿Pues por eso no?
-No...
-Ah... Soy un desastre:( No se que haré con esto, es decir, ¿Tu sabes todo de mi cierto?
-Claro, hasta el color de tus bragas:)
-Rara... bue, lo que intentaba decir, es que si tu sabes sobre Luke y Bill..
-Si:)
-NO SE QUE CARAJOS ESTOY HACIENDO.
-¿A que te refieres?-dijo limpiando el desastre que había hecho.
Comencé a ayudarla a limpiar.
-Pues... Ya van dos meses desde que ambos se me declararon, creo que es muy cruel de mi parte dejarlos esperando tanto...
-¿DOS MESES?
-Sip.
-Loca, no se como aguantan, los torturas maldita.
-No, claro que no, es solo que... no soy nada buena tomando decisiones, ni siquiera se que calcetines ponerme en las mañanas.
-Pero todos son iguales...
-EXACTO, es mas confuso!
-Cassandra...-rió- Déjate de tantos rodeos y déjaselo a tu corazón.
-¿Eh?
-Si, tu corazón. Latirá mas rápido con el indicado, te lo aseguro, te avisara.
-¿Me avisara?
-Si.
-¿Así de simple?
-Sip.
-Ah.... Que estúpida me siento-.-
-Yo así te quiero tonta-rió y me embarro un poco de la mezcla que había preparado.
-Oye!-le devolví la acción y ambas reímos.
Si Nicolas le hacia algo, yo moriría.


Hablando del bastardo de Nicolas.... Ese idiota me traía de los nervios de punta.
Simplemente no lo entendía. Me decía mierda, pero me tocaba.
Me daba pavor el sentir sus labios en mi piel, jamas lo dejaba pasarse de la raya, solo lo dejaba acariciarme, si eso lo mantenía contento y alejado de mis amigos, todo estaría bien para mi, aun si eso me matara del asco e incluyera humillarme.


Con Luke había hablado poco, me lo cruzaba algunas veces por el internado, pero el había estado muy ocupado así que vagamente lo veía.
Por las tardes me la pasaba sola, ya que Marjorie se la vivía con Tom, Bill salia a La Asociación o a darle sus clases a Caroline.
A veces mi única compañía... era Nicolas.
Lo cual me perturbaba.


Bill...


-No Caroline, tienes que seguir la formula, si no la sigues siempre te va a salir mal.
-Agh, pero es medio complicada...
-Son ecuaciones SENCILLAS, el nombre lo dice, son SENCILLAS.-dije frontandome las sienes intentando no perder el control.
-Pero.. no entiendo.-dijo acercándose mas a la mesa para estar mas cerca de mi y dejando su escote algo descubierto.
-Pues si dejaras de mirarme a mi en vez de al cuaderno , tal vez entenderías linda.
-Oh, lo siento... es solo que.. -rio- simplemente no puedo, me gustas mucho Bill.
-No intento ser rudo, pero no me gustan las chicas como tu.
-¿Y cuales te gustan? ¿Las chicas como tu hermana?-dijo levantando una ceja.
-No se de que estas hablando.-dije ordenando los cuadernos.
-Cassandra, ¿Es tu hermana, cierto? Y te gusta...
-No es mi hermana.
-Eso no es lo que todos piensan...
-Por si no te habias dado cuenta, me vale un coño lo que todos piensen, y si sigues así, la verdad no estoy interesado en darte clases, he estado investigando, y no las necesitas, tienes un promedio perfecto en matemáticas, deja de hacerte la tonta que así lo único que conseguirás de mi es mi desprecio, adiós.
-Pues si en verdad te gusta, sea o no tu hermana de sangre, es una abominación, todos saben que la ternurita se muere por Luke Levine.-dijo segundos después de que me levante y estaba por desaparecer de su vista con una sonrisa de placer en su rostro.
-Me vale un carajo.-dije con los puños cerrados de la furia.


Llegue a La Asociación lanzándome sobre un sofá con mala gana.


-Uy, alguien viene de malas.-dijo Hayley pasando por un lado mio con unas carpetas y acomodándolas en un estante.
-No molestes.
-Tu siempre me molestas, es lo justo puerco espín.
La fulmine con la mirada.
-Y tu que haces? Siempre te veo en la oficina, acaso no haces misiones como una cazadora?
-Claro, pero todos tenemos que trabajar en oficinas, a veces vas y a veces no.
-Mmm... decepcionante.
Ella rió.
-Vale, no todo es aventura, siempre hay que esforzarse un poco.
-Cierto...-me saco una sonrisa.- Y tu porque tan amable?-pregunte levantando una ceja divertido.
-Creí que era lo correcto.-sonrió.
-Entonces.... amigos?
-No tan rápido puerco espín, unas palabras amables y ya quieres que sea tu amiga? Que harás cuando te mire? Suponer que soy tu novia? Ja, NO.
-Agresiva y exagerada.
-También sarcástica.-susurro divertida con ironía y descaro.
-Ademas descarada.
-Ya me estas conociendo, no me pidas la primer cita porque mi respuesta sera no.
-Ja-ja que bromista.
Ella se fue riendo y yo me quede allí esperando a Fred, el cual llego unos minutos después y me ordeno hacer no se que cuantas abdominales.


-No.
-No que? Hazlas.
-Tengo excelente condición física y eso ya lo has visto tu , Que estas esperando para enseñarme cosas sobre esto? Es decir, desde que te asignaron a mi lo único que he visto es hacer ejercicio, y sinceramente es inútil ya que no lo necesito.
-No molestes mocoso, yo soy el maestro aquí y yo se que es lo que hago.
-Enséñame algo que no sepa.
El me miro con curiosidad.
-Ugh, esta bien, ve y coge unos libros de por allá.
Sonreí y fui a buscar los libros que me encargo.
Había muchos, por si no lo había mencionado, este lugar tenia algo así como una biblioteca.


"A Cassandra le gustaría venir aquí, le gustan mucho los libros"-pensé y sonreí sin darme cuenta al pensar en ella.


-Hasta aquí puedes llegar chico.-dijo un joven, creo que era algo así como el confidencial del presidente, su nombre era Harold.
-Eh?
-Estos pasillos son solo para cazadores de ultimo nivel, no estas autorizado para estar aquí.
Lo mire con sospecha y me encogí de hombros.
-Valep.
Tome algunos libros y fui a buscar a Fred que ahora se encontraba dormido en el sillón de hace algunos minutos.
-DESPIERTA.-dije lanzandole la pila de libros que traía.
-QUE? QUE? QUE?
- -.-
-Ah si.... haber.-dijo examinando los libros que había cogido.
-Lee... estos.-dijo entregándome unos 5 libros.
-Vale, es todo?
-Que querías? Que me pusiera con un pizarroncito a explicarte todo? No niñita, no.
- -.-.
Me senté a leer un libro mientras Fred dormía a lado mio con el sombrero cubriendo su cara.
-Fred, papa dice que pasaremos el 14 de Febrero juntos.-dijo Hayley con ese tono autoritario de siempre.
-Dile que esta bien, pero solo hasta las 9 pm, porque este galán tiene cosas que hacer.
-Hornear galletitas?-dije bromista.
-A ti nadie te hablo mocoso.-dijo Fred molesto.
-Entonces si? Vale, te espero en casa a las 4 en punto hermano, llega a tiempo.
image-HERMANO?-pregunte exaltado.
-Si... Que no nos parecemos?-dijo Fred sacudiendo su cabello algo así. 
Los mire... se parecían un poco.
-Ew,ew.. ewwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwww, ahora todo tiene sentido.
-Calla idiota.-dijo Hayley enfadada mientras daba media vuelta y se iba a lo suyo.
Yo solo reí.
Así que... hermanos eh? Ahora entiendo de donde le viene la machinidad y el semejante carácter a esta chica.





jueves, 16 de febrero de 2012

Capitulo 37.

Capitulo 37.


La verdad era que probablemente a causa de tanto mirarla, estar a su alrededor y pensar en ella, Nicolas había comenzado a sentir algo por Cassandra.
Tal vez no se habia dado cuenta de ello, pero pronto tendría que hacerlo.

Bill...

-Listo.-dije apenas con un respiro.
Él me miro con sorpresa y diversión.
-Bien.
Me había tomado el resto del día el dar las malditas vueltas a la plaza, pero lo logré.
(LIKE A BOSS, ahre JJAJAJAJAJAJ)
-Ya puedes irte.
-¿Qué? ¿Fue todo? ¿No estudiaremos?
-Mira puercoespin depresivo, yo soy el que da las ordenes aquí ¿No estas de acuerdo? Puedes largarte cuando se te de la gana.
Lo mire con odio.
-Vale.
Volví a La Asociación y llame a Mike para que me recogiera alli.
Lo espere adentro pues andaba sudado y hacia un frio terrible.
Josh me hizo un poco de platica cuando me cruce con él al entrar a La Asociación y él ya iba de salida. Ese viejo me caía bien.
-Te cuidas enano.
-No soy enano.-reí-Soy casi tan alto como tú.
-Eso es... Cierto, cierto.-río.-Pero aún eres un mocoso, portate bien y cuidate de ese amargado que tienes por maestro.
-Vale, cuidate igual.
-Adiós.
Él se fue y mire el lugar, estaba algo vacio. Supuse que siempre había gente aquí, que flojera, consiganse una vida.
Entre las personas que estaban ahi, pude distinguir la figura de Hayley en un escritorio tecleando algo en una computadora.
Tan firme como siempre.
Me acerque a ella por detrás sigilosamente.
-¿Porqué tan seria?
-Aléjate si no quieres que te parta la cara y otras cosas.
-Vale, el otras cosas estuvo de más.-dije alejandome con las manos alzadas como declarando la paz riendo.
-Me entere de que Fred es tu maestro.
-Uy me investigas, ¡me alagas!
-Cállate, todos se dieron cuenta despues de semejante escandalo que armaron. Por cierto, ¿Qué no te cansas de molestarme?
-Nop.
-Eres un imbecil.-dijo aún tecleando.
-Muchas gracias.-dije con una sonrisa forzada.-... ¿Y... qué haces?
-.....
Me ignoro por completo.
-No me ignores cuando intento ser amable.-dije algo molesto.
Ella dio un suspiro profundo y siguio en lo suyo.
-Vale.
Me senté junto a ella y la mire para hacerla sentir incomoda.
Ahora que la miraba bien, no era fea. Tenía los ojos lindos, marrones.
Su cabellera era larga y color café rojizo, y su piel tenía un tono bronceado pero ni tanto.
No usaba ni una gota de maquillaje, con ese uniforme, y su forma de ser, sinceramente por poco y la hago pasar por un hombre.
-Deja de mirarme, ¿Quieres?
-No, no quiero. Asi como tu tampoco quieres contestarme de buena manera.-dije cruzado de brazos.
-Agh, haz lo que quieras.
-¿Segura?-pregunte picaro y ella se percato de ello.
-Eres un pervertido.
-¿Pervertido? Pero si yo no he dicho nada malpensada, sucia, Hayley la sucia, asi te dire.
-Ni siquiera se tu nombre, asi aue te dire oruga boluda.-fruncio el ceño.
-¿Oruga boluda? ¿Que clase de insulto es ese? Suena raro, claro, viniendo de Hayley la sucia...
-¡Callate ya!-dijo golpeandome con una carpeta sonrojada y yo solo reía, ella me recordaba a Cassandra.
Recibi un mensaje de John diciendo que ya estaba afuera.
Me levante y antes de alejarme de ella le dije: Bill, Bill Kaulitz, pero llamame Bill.

Tom...

Despues de jugar un partido de futbol americano y darme una ducha, fui a mi habitación.
Me estaba poniendo una camisa frente al balcón cuando vi a Cassandra entrar a su habitación alterada, dando vueltas alrededor de su habitación, y creo que se dio cuenta de que la observaba porque rápidamente cerro las persianas.
¿Qué le ocurría y porqué no me contaba nada? Se supone que soy su mejor amigo y que nos contamos todo...
Que fraude.
Bueno, sacando eso y volviendo a mi, ya casi se acerca San Valentin, estaba pensando en hacerle algo especial a Marjorie para que finalmente cayera por mi, pero aún no estaba seguro de que sería, para ser sincero, no tenía ni la mas minima idea de que podía hacerle, jamás había hecho algo lindo por una chica en mi vida de esta manera, era algo... nuevo.
Hablaria con Cassandra para que me ayudara, y de paso ver que es lo que le ocurría.
Pero mañana, ahora tengo sueño y no pienso levantarme hasta la cena.

8 días después... 4 para San Valentín.

Había hablado con Cassandra sobre que podía hacerle a Marjorie.

-¿Es enserio?-pregunto incredula.
-Si, quiero hacerle algo especial, como lo que se supone que hacen los galanes en las peliculas de chicas, ya sabes.
-Tom, ¡ESTO SERA GENIAL!-dijo con una sonrisa de oreja a oreja y me dio un abrazo- Mira, primero, le conseguirás flores, le mandaras una rosa, con una carta, un poema, algo lindo pero sencillo, nada ridiculo pasado de tono, luego, sera una invitacion a una cena, la podemos hacer en uno de los jardines, o tal vez en la cabaña de John y Mike, yo me encargo de que quede vacía, luego te pondrás un traje, muy guapo.
-Yo siempre.-sonreí y ella me imito.
-Claro hermanito, bueno, entonces ella llegara, y habra un camino con... ¿Flechas? ¡Y velas! Y llegara hasta el patio trasero, que es donde la estaras esperando, y ahi la conquistaras chiquillo, pan comido.
-Bueno, ¿Pero tú me ayudaras a hacer todo eso que dijiste?-dije haciendo un puchero.
-Ni siquiera tienes que preguntarlo, lo iba a hacer con o sin tu permiso.-dijo sonriendo engreida.
-Te quiero ¿Sabías?
-Si, yo igual tontín.-sonrío y me dio otro abrazo -Bue, te dejo que ya tengo que irme a Quimica, agh, es sencilla pero me castra.-dijo rodando los ojos.
-Bueno, pero aún me debes una platica...
-¡Claro!

Cassandra...

Tom habia estado preguntandome sobre mi animo.. Era obvio que no iba a contarle sobre Nicolas, a él aun no le habían contando sobre los vampiros, y no creo que lo hagan, es muy imprudente y es capaz de gritarlo a los cuatro vientos sin darse cuenta.
Iba caminando por un pasillo completamente aislado, como un atajo a Quimica, si llegaba tarde esta vez me daban suspensión, cuando unos fríos brazos me envolvieron obsecivamente y me cubrieron la boca, encerrándome en un baño.
Nicolas.
-SUÉLTAME.
-No grites linda, alguien podría malpensar lo que ocurre aquí dentro.-dijo hablandome al oído y rozando su nariz con mi cuello haciendo que me dieran escalofríos por miedo.
-Nicolas... Por favor, entiendelo, esto es tonto.
-¿Tonto? A mi me parece divertido verte sufrir.
-Nicol-...
-Sh.-me interrumpió él y me acaricio un brazo.
Dios santo.
-Ni-ni-nicolas...
Tumblr_ly9yz1dtcf1r5sebto1_400_large-Calla, eres una moza, no tienes derecho a hablar.
Sentí como presiono sus labios contra mi cuello y los fue bajando hasta llegar a mi hombro.
¿Qué demonios? Si iba a morderme que lo hiciera ya, no quiero sus asquerosas babas esparcidas por mi cuerpo, asco.
-Suéltame.
Me sujeto bruscamente de los brazos y me giro para que lo viera de frente.
-¿Porqué te quejas? Cualquiera estuviera complacida de que yo la mirara, aunque fuera por odio, o casualidad, y mirate a ti, que mis labios te recorren y te quejas, ¿Porqué?
-Porque yo no te quiero y este cuerpo no es mío, pero tampoco es tuyo.
-¿A que te refieres?
-Este cuerpo es de la persona que amo.
-¿La persona que amas? Jajajajjaja ¿Quién?- me solto y comenzo a caminar alrededor- ¿Luke? ¿Bill? o ¿Tom? Mira tu que te he visto muy cariñosita con el otro gemelo, putita.
-No me digas asi imbécil, es mi hermano.
-Bill tambien, y eso no te detuvo a besarte con él, puta asquerosa.
-Estas colmando mi paciencia Nicolas.
-Me muero de miedo-dijo con ironía en su tono de voz- No me importa, recuerda que la que debe temer aqui eres tú. Y tal vez tus amiguitos tambien, he estado viendo a tu amiga la pelirroja, Marjorie, que presa tan fácil.
-A ELLA NO LA TOQUES ESTUPIDO O TE MATO.
-¿Me matas? Jajajajajajja ¿Cómo? No puedes porque soy INMORTAL, ademas de que no tienes las agallas para acerlo.
-Te odio... Mira, se me hace tarde...
-Largate, te espero en el salón de baile a las 4 en punto, ega un minuto tarde y ya verás.
-... Esta bien.-cedí con la mirada baja llena de vergüenza y temor.
Salí de allí y choque con alguien, no mire quien era, solo seguí mi camino. Iba completamente perdida.Tumblr_lknkolwuws1qbp3i7_large


Bill....

Iba camino a los baños para volarme Artes, a nadie le importaba Artes, cuando choque con Cassandra que iba con la mirada perdida y pálida.
La llame tres veces por su nombre y jamás se giro a verme, así que corrí hacia ella y la tome del brazo y la hice girarse.
Tome su rostro entre mis manos y la hice mirarme.
-¿Qué ocurre idiota?
Ella muy apenas me miro y lo único que hizo fue abrazarme con fuerza, fue un abrazo lleno de temor, culpa y tristeza.
Acaricie su cabello y bese su frente.
-¿Quieres saltarte esta clase?
Asintió con la cabeza sin despegarla de mi pecho.
-Ven.-la separe de mi y me agache para que subiera a mi espalda.-Sube, vamos a la biblioteca ratita.
Sentí sus pequeños brazos rodear mi cuello y aferrarse a mi camisa.
La cargue hasta llegar a un rincón en la biblioteca donde nadie nos molestaría.
Se sentó con las piernas cruzadas y jugueteaba con sus manos mirando al suelo.

-¿ Algún día vas a decirme lo que te ocurre?
-...
-¿Que tienes? Cas, me preocupo por ti, lo digo enserio, quiero saber todo sobre ti, lo que te ocurre, si tu no me dejas entrar a tu mente jamas podre entablar una r-
-Abrazo.-musito.
-¿Eh?
-Abrazo, dame un abrazo, es todo lo que quiero.
-Ven aquí boba.-dije abriendo mis brazos para que se acomodara en mi. Le acariciaba el cabello mientras ella jugueteaba con mis brazos alrededor de ella.
-¿Que es esto?-pregunto al levantarme las mangas y notar unos rasguños.
-Nada.
-¿Como que nada? Bill, se ven recientes, ¿Porque no me llamaste?
-Ya te he dicho que no quiero que seas mi niñera, estoy grande ¿No te das cuenta que puedo cuidarme solo?-dije algo molesto.
-Si claro, ¿Estas idiota o que? Oh, eso no es una pregunta, es mas un hecho.
-Ya vas a empezar.-dije molesto y deje de abrazarla para cruzarme de brazos.
-Si, ya voy a empezar, estúpido , y tu también, te he dicho que cuando esto ocurra me llames, y no es una pregunta es una maldita orden ¿Entiendes?
-Claro oficial.-dije con ironía rodando los ojos.
-Bill... lo digo enserio, me preocupo por ti.-dijo tomándome del mentón haciendo que la mirara directamente a esos ojos que parecían perlas del mar. No pude evitar ver sus labios mientras hablaban.
-Yo también me preocupo por ti, y jamas me cuentas nada.
-Si no te cuento nada es porque no puedo.
-¿Porque?
-Porque no puedo, tan simple como eso.
-¿No puedes o no quieres?
-No puedo y ya deja de interrogarme que me estas haciendo sentir incomoda, ¿Sabes? Mejor me largo, por tu culpa me van a suspender por haberme saltado la clase, agh.
-Bipolar.
-No me dirijas la palabra ¿Quieres?
-Wo wo wo, ¿Porque el cambio de humor cariño?
-Porque se me da la regalada gana, "CARIÑO"-dijo recalcando la ultima palabra y saliendo hecha una furia de la biblioteca, yo reí por lo bajo.
Aunque no podía sacarme la duda de que es lo que le sucedía a esta chica que la traia así.

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Oigan,pues a como va esto creo que ya no la seguire, nadie la lee:( Y la verdad me siento mal por esas personas que si han estado aqui todo el tiempo, y pues haber que hago *le cries*
Yo la verdad si estaba super entusiasmada con seguir esta, si alcaso les hare un resumen con lo que se supone que iba a pasar o lo que sea pero pues buee..... no veo comentarios ni nada:( 
Las quiero!


domingo, 5 de febrero de 2012

Capitulo 36


Capitulo 36.

Bill...

-Creo que lo mejor será que regrese a mi pieza.-dijo ella poniéndose de pie pero yo la detuve.
-¿No irás a cenar?
-Nop.-negó dulcemente con la cabeza.-últimamente no he tenido mucho apetito.
-¿Estas enferma? Si quieres podemos ir a la enfermería o llamar a un doctor.
-No, no es eso, mejor dicho, no sé, supongo que es el estrés, soy un imán de problemas.-río nerviosa y mire bien sus ojeras, no había dormido bien.
-Vamos.-dije tomando su mano y caminando fuera de la habitación.
-¿Qué? ¿A dónde? Bill, si me ven salir de aquí me reportarán.
-Al comedor, iremos a que comas algo, no es bueno que te mates de hambre por preocupación, sea lo que sea que te esta preocupando, le irá mal, ya sabes que puedes contarme lo que quieras.
-Lo sé, lo sé... -dijo con la voz apagada-.. Bill, no quiero cenar, enserio, no tengo apetito, prefiero dormir un poco.-dijo deteniendo el paso.
-No, te enfermarás, vamos.
Intenté seguir caminando pero ella seguía parada.
-No.
-No me obligues, Cassie.-alce las cejas en señal de advertencia.
-N-O.
-Di que yo te advertí.-la tome de la cintura y la cargue en mi hombro.
-¡Bájame animal!-dijo pataleando y dándome pequeños golpes en la espalda mientras yo reía.
Siguió así como por medio camino, después se canso y se cruzo de brazos.
-¿Porqué estabas tan malhumorado cuando me viste?-preguntó.
-Por algo que ocurrió en La Asociación.
-¿Qué?
-¿Recuerdas que te dije que finalmente me aceptaron y que me dieron un maestro?-ella asintió-Bueno, yo tenía planeado que me asignaran a Mike o John, para que fuera mas sencillo y que no tuviera la necesidad de ir a La Asociación a diario, pero no, tuvieron que asignarme a un imbécil que no tengo ni la más puta idea de quien es.
-¿Sabes? Hablaríamos mejor si me bajaras.
La baje de mis hombros y camino a mi lado.
-Vale, ¿Y cómo se llama?
-Aún no lo se, llega mañana al pueblo.
-Oh, pues espero que te comportes, eres muy maleducado con los maestros.
-¿Eh? Bueno no lo niego, nadie debe mandarme.
-Yo si.
-No.
-Si, y ¿Quieres saber por qué?
-No, y si.
-Porqué soy mujer, y las mujeres tenemos ese algo que los hombres no pueden discutir.-sonrío.
Maldita, tenía razón, me tenía comiendo de la palma de su mano.
-Vale, es cierto, pero te falto algo.
-¿Qué?-pregunto mirándome con aquellos ojos azules que yo daba lo que fuera porque me miraran.
-Que me controlas porque tienes ese algo, y esto.-dije tomando su mano y poniéndola en mi pecho donde se encuentra al corazón.
Ella se abochorno y retiro su mano inmediatamente y acelero el paso.
Reí.
Me encantaba verla así.
-Pensé que no tenías hambre ¿Porqué tanta prisa?
-Cállate, ahora si tengo.
Reí y finalmente llegamos al comedor.
Nos sentamos con Tom y Marjorie, cuando llegamos los encontramos entre risas y miradas delatoras.
Estos dos finalmente traían algo.
Varias veces Tom intentó tomar su mano, pero ella la ocultaba bajo la mesa o se movía.
Eso debía tener mas que frustrado a mi hermanito.

Tom...

Marjorie estaba jugando conmigo.
Un segundo me sonríe, y al otro ni siquiera me mira.

Me encanta.

Si hay algo que me gusta en una mujer es que se haga del rogar, las fáciles no me interesan más de una noche.
Pero Marjorie, ella es diferente, cuando la miro, es diferente a cuando miro a las demás, es como si mis ojos no quisieran mirar otra cosa.
La idea de estar enamorado es absurda, lo único que quiero es hacer a esa preciosura mía, o al menos eso pienso por ahora.
Enamorarme no esta en mis planes.
Yo le lanzaba miradas juguetonas y ella se sonrojaba, se veía linda.
¿Qué tiene esta chica que me vuelve loco?

Al día siguiente....

Bill...

El día fue de lo más normal, termine las clases y hoy por suerte no me tocaba darle clases a Caroline, así que me fui directamente a La Asociación. Hoy iba a conocer a mi maestro.
Ahora me encontraba sentado en un sofá de por allí esperando a mi nuevo maestro.

-¿Esperando a tu maestro?-pregunto Josh, aquel hombre que siempre estaba en la entrada, me había hecho amigo de él.
-Si, el inútil ya lleva 13 minutos de clase desperdiciados, y no pienso regresárselos.-dije con malhumor.
-Vale chico, yo lo conozco, y será mejor que no le digas así en su cara o te irá mal.-río y yo lo fulmine con la mirada.
-¿Osease que tiene mal carácter? Dudo mucho que tenga peor carácter que yo.
-Créeme, lo tiene.

Escuchamos como alguien llego con mucho escandalo azotando la puerta y dando fuertes pisadas, mejor dicho caminando de lo más normal con unas botas ruidosas.
Lo miré, era un hombre como de la edad de Mike y John, cabello negro algo largo, no le pasaba a los hombros. Usaba un sombrero y un saco de cuero café, botas negras, una camisa negra abotonada hasta el antepenúltimo botón dejando ver algo de su pecho y unos pantalones algo ajustados.
-Llegas tarde.-dije sin mirarlo mientras pasaba por un lado mio.
Se detuvo y dio media vuelta y me miro fríamente.
Nuestras miradas chocaron, como si estuvieran en una pelea de quien es mas fuerte que quien.
No hubiéramos parado si no fuera por el presidente que nos interrumpió.
-¡Fred! Que gusto verte.-dijo sonriente el presidente.
-Quisiera decir lo mismo.-dijo él aun con su mirada atemorizante sobre mí.
-Veo que ya se conocieron.-dijo el presidente.
-Si se refiere a este hombre y a mí, esta equivocado, lo único que ha pasado aquí es la llegada escandalosa de este hombre, que por cierto retrasada.-dije retándolo con la mirada.
-Bueno, ya, calmados muchachos, si continúan así creo que terminaran matándose, supuse que esto seria algo así.
Ambos respiramos profundo, cerramos los ojos mientras lo hacíamos, y los abrimos al mismo tiempo para mirar al presidente.
El solo río.

-Vale, te presento a tu maestro, Frederick Peete.
-Será mejor que seas bueno gusano, no me hagas malgastar mi tiempo.
-Ya para Fred, te presento a tu aprendiz, Bill Kaulitz.
Frederick miro de reojo al presidente algo indeciso, y luego me miro a mi nuevamente.
-Mas te vale que seas bueno viejo, no me fue fácil llegar aquí, no me malgastes.
El río por lo bajo.
-Bien, los dejo solos.-dijo el presidente en alto para que todos los que estaban ahí se largaran, si no hubiera sido por eso no me hubiera percatado del escandalo que habíamos armado.
Él dio media vuelta y camino. ¿A donde? No tengo ni la menor idea.

Lo seguí.

Salió de La Asociación y yo fui tras de él en completo silencio.

-¿Vas a seguirme todo el día gusano?-pregunto después de un buen rato de pasear por el pueblo.
-Se supone que debo hacerlo.
-¿Se supone? Lárgate a hacer tu tarea y dormir que se te hace tarde niño.
-Son las 5 de la tarde-.-
-¿Qué no es tu hora de dormir ya?
-Mira viejo, viniste aquí para enseñarme todo lo que tengo que saber para convertirme en un cazador, no para acobardarte y dar vuelta atrás sin siquiera intentarlo, cuando te vi entrar pensé que al menos tenias un poco de agallas, pero al parecer eres un fracasado, un perezoso y un inútil, hasta ahora has malgastado mi tiempo, y fue lo primero que te dije que no hicieras, así de incompetente eres.
Él me miro fijo.
-¿Vas a mirarme todo el día o vas a comenzar tu trabajo? Mira tú que tantas miradas me hacen pensar que te gusto eh.-bromee.
-Déjate de estupideces niño.
-Vale, ¿Vamos a comenzar ya o me es necesario solicitar un nuevo maestro? No me cae nada mal la idea.
Él solo siguió caminando.
Suspire y di media vuelta camino a La Asociación.
-Da 68 vueltas a la plaza.-lo escuche decir.
Sonreí por lo bajo, era justo lo que estaba esperando.
-¿68? ¿Estas demente? ¡Esto mide alrededor de 130 kilómetros!
-Si, dije que dieras 69, y como te quejas de dar 70, ahora en lugar de dar esas 71, darás 72.
-¿Eh? Eso no tiene sentido.
-¿Te quejas de 73? Vale, da 75 para que tenga sentido.
Respire profundo para no darle una paliza ahí mismo, y comenzó a correr tal como él me pidió.
El bastardo se estaba vengando duro por haberlo insultado.


Cassandra...

-¡Déjame en paz Nicolas! Se que eres tú, se que estas ahí, salde donde quiera que estés, ya para con esto, no puedo, me tienes harta, ya, por favor, tal vez sea divertido para ti, pero no lo es para mí.-dije dando vueltas intentando encontrar a Nicolas riéndose de mi en algún lugar, tenia la voz temblorosa y lágrimas recorrían mi rostro sin parar.
El acoso de Nicolas ya llevaba semanas, sin parar, sentía su presencia las 24 horas los 7 días a la semana, solo su presencia, de vez en cuando me tocaba, encendía cosas, tumbaba cosas, lo escuchaba en mi cabeza, más nunca se mostraba.
Eso era lo que mas me perturbaba.
-¡MUESTRATE COBARDE!
Lo escuche reír sínicamente.
Me encontraba en la sala de baile, esta sala casi no se utilizaba, pero yo venía aquí los martes a practicar danza.
Había intentado abrir la puerta indefinidas veces pero esta estaba cerrada con llave, las luces se apagaron por ninguna razón y las cortinas se cerraron.
Así fue como me di cuenta de que Nicolas estaba ahí.
-DEJAME SALIR MALDITO BASTARDO.
-¿No te he dicho que me hables con mas respeto.... Dulzura?
Apareció de la nada y pase de estar golpeando la puerta a estar con los pies flotando en el aire con las manos de Nicolas alrededor de mi cuello.
-Te ves tan vulnerable, tan débil.-rio.
Yo luchaba por liberarme de él, me constaba respirar.
-¿Qué? ¿Se te fueron las ganas de insultarme? Inmunda.-dijo mirándome con desprecio y escondiendo su rostro en mi cuello haciéndome sentir asco de tenerlo tan cerca.
Le escupí con el ultimo aliento que tuve y el me lanzo al suelo con fuerza, provocando que me resbalara atraves de la sala y quemara con el roce del suelo.
-Auch.-gemí.
-¿Qué? ¿Te dolió? Haber déjame disculparme.-dijo con ironía y me levanto de un tirón del brazo.
-Me lastimas…
-Ese es el punto linda, una puta como tu debería estar pudriéndose en el infierno.
-¿Qué carajos te he hecho Nicolas?-dije aun llorando.
-Nacer, eso hiciste. Eres una porquería que jamás debió de haber existido. Aun no entiendo que demonios te vio, eres una humana, y el pudiendo tener de lo mejor, te busca a ti, una mierda que no vale ni un centavo.
-¿Luke?
-Si, Luke. ¿A quien mas te tiras putita?
-Mira Nicolas, a mi no me faltes al respeto, yo no soy ninguna putita, estúpido.
-Cállate puta. Y no me digas que no lo eres que bien que te traes algo con ese maleducado de tu hermanastro, porque yo se muy bien de eso, puta.
-Tu no sabes nada…
-Se lo suficiente como para decir que eres una puta de segunda.
-Algún día te arrepentirás de esto Nicolas, lo prometo.
-Uy que miedo lindura. ¿Qué harás? ¿Darme con una estaca? JA! Que graciosa.
-Te odio.
-Yo también preciosa.
-¿Por qué me haces esto Nicolas? ¿Por qué no me matas si me odias tanto?
-¿Por qué? Que buena pregunta. –me tomo de los cabellos y me acaricio la espalda y lo detuve antes de llegar a mis muslos.- ¿Por diversión tal vez? La vida no es nada sin un poco de diversión.
-Nicolas no te entiendo, esto que me estas haciendo es completamente estúpido. Si te doy tanto asco ¿Por qué me miras asi? ¿Por qué me acosas… sexualmente?
El me miro confundido.
-Alucinas niña.
-¿Alucino? ¿Acaso son alucinaciones cuando me estoy cambiando y siento que me observas? ¿O fue una alucinación cuando me acariciaste haces unos segundos?
-Estas loca.-me solto con fuerza.- Solo recuerda esto, eres mia.

Desaparecio.

La verdad era que esas palabras habían dejado pensando a Nicolas, era cierto que la miraba de una manera extraña, varias veces la acariciaba, de vez en cuando se acercaba lo suficiente como para conservar su olor.
Nicolas no quería admitirlo, pero la verdad era que….

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Tuve algunos problemas para subir el capitulo, perdonen por la espera, comenten porfaaaaa! Casi no veo coments y subire cada que vea mas o menos muchos:D
Las amo y muchas gracias por leer! Ya casi somos 100:)