Capitulo 37.

Capitulo 37.

La verdad era que probablemente a causa de tanto mirarla, estar a su alrededor y pensar en ella, Nicolas había comenzado a sentir algo por Cassandra.

Tal vez no se habia dado cuenta de ello, pero pronto tendría que hacerlo.

Bill...

-Listo.-dije apenas con un respiro.

Él me miro con sorpresa y diversión.

-Bien.

Me había tomado el resto del día el dar las malditas vueltas a la plaza, pero lo logré.

(LIKE A BOSS, ahre JJAJAJAJAJAJ)

-Ya puedes irte.

-¿Qué? ¿Fue todo? ¿No estudiaremos?

-Mira puercoespin depresivo, yo soy el que da las ordenes aquí ¿No estas de acuerdo? Puedes largarte cuando se te de la gana.

Lo mire con odio.

-Vale.

Volví a La Asociación y llame a Mike para que me recogiera alli.

Lo espere adentro pues andaba sudado y hacia un frio terrible.

Josh me hizo un poco de platica cuando me cruce con él al entrar a La Asociación y él ya iba de salida. Ese viejo me caía bien.

-Te cuidas enano.

-No soy enano.-reí-Soy casi tan alto como tú.

-Eso es... Cierto, cierto.-río.-Pero aún eres un mocoso, portate bien y cuidate de ese amargado que tienes por maestro.

-Vale, cuidate igual.

-Adiós.

Él se fue y mire el lugar, estaba algo vacio. Supuse que siempre había gente aquí, que flojera, consiganse una vida.

Entre las personas que estaban ahi, pude distinguir la figura de Hayley en un escritorio tecleando algo en una computadora.

Tan firme como siempre.

Me acerque a ella por detrás sigilosamente.

-¿Porqué tan seria?

-Aléjate si no quieres que te parta la cara y otras cosas.

-Vale, el otras cosas estuvo de más.-dije alejandome con las manos alzadas como declarando la paz riendo.

-Me entere de que Fred es tu maestro.

-Uy me investigas, ¡me alagas!

-Cállate, todos se dieron cuenta despues de semejante escandalo que armaron. Por cierto, ¿Qué no te cansas de molestarme?

-Nop.

-Eres un imbecil.-dijo aún tecleando.

-Muchas gracias.-dije con una sonrisa forzada.-... ¿Y... qué haces?

-.....

Me ignoro por completo.

-No me ignores cuando intento ser amable.-dije algo molesto.

Ella dio un suspiro profundo y siguio en lo suyo.

-Vale.

Me senté junto a ella y la mire para hacerla sentir incomoda.

Ahora que la miraba bien, no era fea. Tenía los ojos lindos, marrones.

Su cabellera era larga y color café rojizo, y su piel tenía un tono bronceado pero ni tanto.

No usaba ni una gota de maquillaje, con ese uniforme, y su forma de ser, sinceramente por poco y la hago pasar por un hombre.

-Deja de mirarme, ¿Quieres?

-No, no quiero. Asi como tu tampoco quieres contestarme de buena manera.-dije cruzado de brazos.

-Agh, haz lo que quieras.

-¿Segura?-pregunte picaro y ella se percato de ello.

-Eres un pervertido.

-¿Pervertido? Pero si yo no he dicho nada malpensada, sucia, Hayley la sucia, asi te dire.

-Ni siquiera se tu nombre, asi aue te dire oruga boluda.-fruncio el ceño.

-¿Oruga boluda? ¿Que clase de insulto es ese? Suena raro, claro, viniendo de Hayley la sucia...

-¡Callate ya!-dijo golpeandome con una carpeta sonrojada y yo solo reía, ella me recordaba a Cassandra.

Recibi un mensaje de John diciendo que ya estaba afuera.

Me levante y antes de alejarme de ella le dije: Bill, Bill Kaulitz, pero llamame Bill.

Tom...

Despues de jugar un partido de futbol americano y darme una ducha, fui a mi habitación.

Me estaba poniendo una camisa frente al balcón cuando vi a Cassandra entrar a su habitación alterada, dando vueltas alrededor de su habitación, y creo que se dio cuenta de que la observaba porque rápidamente cerro las persianas.

¿Qué le ocurría y porqué no me contaba nada? Se supone que soy su mejor amigo y que nos contamos todo...

Que fraude.

Bueno, sacando eso y volviendo a mi, ya casi se acerca San Valentin, estaba pensando en hacerle algo especial a Marjorie para que finalmente cayera por mi, pero aún no estaba seguro de que sería, para ser sincero, no tenía ni la mas minima idea de que podía hacerle, jamás había hecho algo lindo por una chica en mi vida de esta manera, era algo... nuevo.

Hablaria con Cassandra para que me ayudara, y de paso ver que es lo que le ocurría.

Pero mañana, ahora tengo sueño y no pienso levantarme hasta la cena.

8 días después... 4 para San Valentín.

Había hablado con Cassandra sobre que podía hacerle a Marjorie.

-¿Es enserio?-pregunto incredula.

-Si, quiero hacerle algo especial, como lo que se supone que hacen los galanes en las peliculas de chicas, ya sabes.

-Tom, ¡ESTO SERA GENIAL!-dijo con una sonrisa de oreja a oreja y me dio un abrazo- Mira, primero, le conseguirás flores, le mandaras una rosa, con una carta, un poema, algo lindo pero sencillo, nada ridiculo pasado de tono, luego, sera una invitacion a una cena, la podemos hacer en uno de los jardines, o tal vez en la cabaña de John y Mike, yo me encargo de que quede vacía, luego te pondrás un traje, muy guapo.

-Yo siempre.-sonreí y ella me imito.

-Claro hermanito, bueno, entonces ella llegara, y habra un camino con... ¿Flechas? ¡Y velas! Y llegara hasta el patio trasero, que es donde la estaras esperando, y ahi la conquistaras chiquillo, pan comido.

-Bueno, ¿Pero tú me ayudaras a hacer todo eso que dijiste?-dije haciendo un puchero.

-Ni siquiera tienes que preguntarlo, lo iba a hacer con o sin tu permiso.-dijo sonriendo engreida.

-Te quiero ¿Sabías?

-Si, yo igual tontín.-sonrío y me dio otro abrazo -Bue, te dejo que ya tengo que irme a Quimica, agh, es sencilla pero me castra.-dijo rodando los ojos.

-Bueno, pero aún me debes una platica...

-¡Claro!

Cassandra...

Tom habia estado preguntandome sobre mi animo.. Era obvio que no iba a contarle sobre Nicolas, a él aun no le habían contando sobre los vampiros, y no creo que lo hagan, es muy imprudente y es capaz de gritarlo a los cuatro vientos sin darse cuenta.

Iba caminando por un pasillo completamente aislado, como un atajo a Quimica, si llegaba tarde esta vez me daban suspensión, cuando unos fríos brazos me envolvieron obsecivamente y me cubrieron la boca, encerrándome en un baño.

Nicolas.

-SUÉLTAME.

-No grites linda, alguien podría malpensar lo que ocurre aquí dentro.-dijo hablandome al oído y rozando su nariz con mi cuello haciendo que me dieran escalofríos por miedo.

-Nicolas... Por favor, entiendelo, esto es tonto.

-¿Tonto? A mi me parece divertido verte sufrir.

-Nicol-...

-Sh.-me interrumpió él y me acaricio un brazo.

Dios santo.

-Ni-ni-nicolas...

-Calla, eres una moza, no tienes derecho a hablar.

Sentí como presiono sus labios contra mi cuello y los fue bajando hasta llegar a mi hombro.

¿Qué demonios? Si iba a morderme que lo hiciera ya, no quiero sus asquerosas babas esparcidas por mi cuerpo, asco.

-Suéltame.

Me sujeto bruscamente de los brazos y me giro para que lo viera de frente.

-¿Porqué te quejas? Cualquiera estuviera complacida de que yo la mirara, aunque fuera por odio, o casualidad, y mirate a ti, que mis labios te recorren y te quejas, ¿Porqué?

-Porque yo no te quiero y este cuerpo no es mío, pero tampoco es tuyo.

-¿A que te refieres?

-Este cuerpo es de la persona que amo.

-¿La persona que amas? Jajajajjaja ¿Quién?- me solto y comenzo a caminar alrededor- ¿Luke? ¿Bill? o ¿Tom? Mira tu que te he visto muy cariñosita con el otro gemelo, putita.

-No me digas asi imbécil, es mi hermano.

-Bill tambien, y eso no te detuvo a besarte con él, puta asquerosa.

-Estas colmando mi paciencia Nicolas.

-Me muero de miedo-dijo con ironía en su tono de voz- No me importa, recuerda que la que debe temer aqui eres tú. Y tal vez tus amiguitos tambien, he estado viendo a tu amiga la pelirroja, Marjorie, que presa tan fácil.

-A ELLA NO LA TOQUES ESTUPIDO O TE MATO.

-¿Me matas? Jajajajajajja ¿Cómo? No puedes porque soy INMORTAL, ademas de que no tienes las agallas para acerlo.

-Te odio... Mira, se me hace tarde...

-Largate, te espero en el salón de baile a las 4 en punto, ega un minuto tarde y ya verás.

-... Esta bien.-cedí con la mirada baja llena de vergüenza y temor.

Salí de allí y choque con alguien, no mire quien era, solo seguí mi camino. Iba completamente perdida.

Bill....

Iba camino a los baños para volarme Artes, a nadie le importaba Artes, cuando choque con Cassandra que iba con la mirada perdida y pálida.

La llame tres veces por su nombre y jamás se giro a verme, así que corrí hacia ella y la tome del brazo y la hice girarse.

Tome su rostro entre mis manos y la hice mirarme.

-¿Qué ocurre idiota?

Ella muy apenas me miro y lo único que hizo fue abrazarme con fuerza, fue un abrazo lleno de temor, culpa y tristeza.

Acaricie su cabello y bese su frente.

-¿Quieres saltarte esta clase?

Asintió con la cabeza sin despegarla de mi pecho.

-Ven.-la separe de mi y me agache para que subiera a mi espalda.-Sube, vamos a la biblioteca ratita.

Sentí sus pequeños brazos rodear mi cuello y aferrarse a mi camisa.

La cargue hasta llegar a un rincón en la biblioteca donde nadie nos molestaría.

Se sentó con las piernas cruzadas y jugueteaba con sus manos mirando al suelo.

-¿ Algún día vas a decirme lo que te ocurre?

-...

-¿Que tienes? Cas, me preocupo por ti, lo digo enserio, quiero saber todo sobre ti, lo que te ocurre, si tu no me dejas entrar a tu mente jamas podre entablar una r-

-Abrazo.-musito.

-¿Eh?

-Abrazo, dame un abrazo, es todo lo que quiero.

-Ven aquí boba.-dije abriendo mis brazos para que se acomodara en mi. Le acariciaba el cabello mientras ella jugueteaba con mis brazos alrededor de ella.

-¿Que es esto?-pregunto al levantarme las mangas y notar unos rasguños.

-Nada.

-¿Como que nada? Bill, se ven recientes, ¿Porque no me llamaste?

-Ya te he dicho que no quiero que seas mi niñera, estoy grande ¿No te das cuenta que puedo cuidarme solo?-dije algo molesto.

-Si claro, ¿Estas idiota o que? Oh, eso no es una pregunta, es mas un hecho.

-Ya vas a empezar.-dije molesto y deje de abrazarla para cruzarme de brazos.

-Si, ya voy a empezar, estúpido , y tu también, te he dicho que cuando esto ocurra me llames, y no es una pregunta es una maldita orden ¿Entiendes?

-Claro oficial.-dije con ironía rodando los ojos.

-Bill... lo digo enserio, me preocupo por ti.-dijo tomándome del mentón haciendo que la mirara directamente a esos ojos que parecían perlas del mar. No pude evitar ver sus labios mientras hablaban.

-Yo también me preocupo por ti, y jamas me cuentas nada.

-Si no te cuento nada es porque no puedo.

-¿Porque?

-Porque no puedo, tan simple como eso.

-¿No puedes o no quieres?

-No puedo y ya deja de interrogarme que me estas haciendo sentir incomoda, ¿Sabes? Mejor me largo, por tu culpa me van a suspender por haberme saltado la clase, agh.

-Bipolar.

-No me dirijas la palabra ¿Quieres?

-Wo wo wo, ¿Porque el cambio de humor cariño?

-Porque se me da la regalada gana, "CARIÑO"-dijo recalcando la ultima palabra y saliendo hecha una furia de la biblioteca, yo reí por lo bajo.

Aunque no podía sacarme la duda de que es lo que le sucedía a esta chica que la traia así.

Oigan,pues a como va esto creo que ya no la seguire, nadie la lee:( Y la verdad me siento mal por esas personas que si han estado aqui todo el tiempo, y pues haber que hago *le cries*
Yo la verdad si estaba super entusiasmada con seguir esta, si alcaso les hare un resumen con lo que se supone que iba a pasar o lo que sea pero pues buee..... no veo comentarios ni nada:( 
Las quiero!